Las Navidades nos encantan. Las reuniones con los nuestros, las comilonas bañadas de cava y la ilusión por descubrir qué han decidido traernos este año los Reyes Magos. Muchísimas emociones que nos enamoran y agotan por igual. Por eso, al finalizar la Navidad, incluso nos apetece volver a la rutina. Eso sí, cuando llevamos instalados unos días en ella (por ejemplo, ahora) soñamos con volver a romperla. Hay quienes se conforman con hacerlo tomando un postre distinto (¿a alguien le suena si le digo ¡Cruje tu rutina! con una cuchara, un lácteo y un extraño dibujo con cara de mala leche?). Pues bien, nuestra propuesta es un poco más radical y muchísimo más efectiva: nada tiene el poder de evadir nuestra mente y transportarnos a un mundo desconocido como un viaje por la exótica geografía de Marruecos.
¡Y hacia allí que nos vamos de nuevo porqué tenemos el placer de poderos anunciar que un año más hemos logrado un magnífico grupo de ruteros que quieren participar en nuestra Gran Ruta!
¿Cómo, qué tu también quieres venir?
¡Pues inscríbete antes del 1 de febrero y únete al grupo!
Seguramente muchos de vosotros no habréis oído nunca hablar del viaje Gran Ruta de Buena Ruta. Se trata, ni más ni menos, que de un recorrido de 23 días que une en una sola experiencia los dos grandes clásicos de Buena Ruta en Marruecos: El Atlas y el Desierto de Oro y La ruta de las mil Kasbash. El primero es aquel que nos invita a cruzar la cordillera del Atlas visitando las Ciudades Imperiales de Fez y Meknes, un recorrido para perderse por zocos y laberínticas medinas, conociendo algunas de las ciudades más importantes y características del país. El segundo es un camino mucho más desconocido que transcurre entre el desierto y el Océano Atlántico, donde el paisaje adquiere un gran protagonismo. Y por supuesto, todo ello lo conoceremos a bordo de nuestras autocaravanas, que nos servirán para recorrer los cerca de 3.300 kilómetros que configuran esta aventura.
Y aunque la autocaravana será nuestro medio de transporte principal, os tenemos preparadas muchísimas propuestas. Por supuesto, no os libraréis de un buen dolor de pies después de andar y andar mirando embobados a vuestro alrededor, dispararemos vuestra adrenalina montados en 4×4, nos desplazaremos en autocar privado para visitar la fortaleza de Bori Sud y otros imprescindibles de la Ciudad Imperial de Fez y nos moveremos por el desierto de Merzouga subidos en dromedario para ver la puesta de sol desde las dunas. Pero como suele suceder, lo mejor de un lugar suele ser su gente. ¡Por eso nos encanta hacer este viaje año tras año! Porqué en todos nuestras visitas anteriores hemos ido haciendo un montón de amigos que estamos esperando ver de nuevo y que siempre nos reciben (a nosotros y a nuestros acompañantes) con los brazos abiertos. Gracias a ellos, conoceremos las costumbres locales de la mano de quienes llevan años practicándolas, las mejores recetas tradicionales y el calor del recibimiento marroquí (donde no puede faltar una buena taza de té).
Aventuras, amigos inolvidables… y una geografía única. Os aseguramos que si os unís a nosotros quedarán para siempre grabadas en vuestra mente las imágenes de parajes tan impresionantes como la plaza de Djemaa el Enaa, las Gargantas del Ziz, las del Dades y las del Todra, el Tizi-n-Tcha o el antiguo Ksar de Aït Benhaddou, escenario de numerosas películas que siempre sorprende por su ubicación y estado de conservación.
Y así podríamos seguir, horas y horas, enumerándoos las miles de razones que hicieron que Marruecos nos robara el corazón y que de alguna manera, se convirtiera en el culpable de todo lo que hoy en día es Buena Ruta. Pero vosotros no tenéis la culpa de esta pasión desbordada que sentimos por nuestro país vecino, así que de momento, hasta aquí llega nuestro post de hoy. Eso sí, si tenéis ganas de saber un poco más sobre nuestra Gran Ruta o queréis formar parte de ella, aquí encontraréis todo lo que necesitáis saber sobre este viaje.
¡Hasta la próxima y buena ruta!